Anoche dormí entre tus brazos
hoy desperté en medio de ellos
y es que tu perfume aún no se ha marchado
ni tus caricias, ni tu celo,
y tampoco el sabor de tu sexo en mi boca.
Apenas regreso al vacío de tu ausencia
y me carcomen las heridas de mi cama,
ese catre que un día fue tuyo y mío
y me cuenta cada noche nuestra historia.
Aún conservo esa prenda íntima que me dejaste
la coloco cerca mi pecho y te respiro,
te respiro profundamente como en aquellos días
y te deseo con más furia que un león en celo.
El deseo... deseo tus partes íntimas,
deseo tu cuello, y tus frágiles cabellos,
deseo tu miembro entre mis piernas
y deseo tus uñas debajo de mis hombros.
Si pudiera tan sólo traerte de vuelta,
pero es imposible si tú no quieres,
no sería correcto ni soy capaz
de obligarte a amarme, aunque ya lo hagas.
Te fuiste y me dejaste,
como a una casa abandonada,
viejo por las arrugas de la tristeza,
desolado como un alma sin Dios.
¿Qué es la realidad? Es la búsqueda del Amor y sólo al Amor vamos y por el Amor vivimos y por el Amor morimos y por el Amor resucitamos; en fin, la realidad es la búsqueda de Dios.
Bienvenid@....
De pensamientos y otras realidades es creado para que podamos compartir pensamientos, aquellos que nos agradan, cuentos, relatos cortos, nuestros o que nos gustaron. También para compartir realidades reales o abstractas.
Sólo te pido que no sean ofensivas.
lunes, 3 de junio de 2019
Huír...
Quiero irme,
quiero verme marchar
como espuma que va al mar.
Quiero sentir mis alas
al viento fuerte y furioso
y quebrar la tempestad que en él está.
Quiero coger con furia
a mi presa
sintiendo todo mi enojo descargar.
Ya no siento la tristeza
ni la vaga soledad,
siento sólo lejanía
y mi cuerpo quebrantar.
No siento ya mis piernas,
ni mis brazos ni mi azar,
tengo sólo mi cabeza
a punto de estallar.
Quiero irme,
quiero fugar,
me quiero escapar.
quiero verme marchar
como espuma que va al mar.
Quiero sentir mis alas
al viento fuerte y furioso
y quebrar la tempestad que en él está.
Quiero coger con furia
a mi presa
sintiendo todo mi enojo descargar.
Ya no siento la tristeza
ni la vaga soledad,
siento sólo lejanía
y mi cuerpo quebrantar.
No siento ya mis piernas,
ni mis brazos ni mi azar,
tengo sólo mi cabeza
a punto de estallar.
Quiero irme,
quiero fugar,
me quiero escapar.
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